Los Misioneros del Verbo Divino (SVD) somos una comunidad católica internacional de religiosos misioneros, sacerdotes y hermanos, animados por el llamado común que hemos recibido de Jesús para anunciar la Buena Nueva a todas las naciones, preferentemente en los lugares donde todavía no se conoce el Evangelio o donde la Iglesia local no puede valerse por sí misma.
Nuestra presencia en Ecuador tiene antecedentes desde el siglo XIX, cuando dos misioneros fueron enviados a la Diócesis de Portoviejo (Manabí), en el tiempo de la revolución liberal.
Arnoldo Janssen nació el 5 de noviembre de 1837 en Goch, una pequeña ciudad alemana de la Baja Renania. Segundo de diez hermanos, aprendió de su padre a ser un hombre de profunda religiosidad.
Arnoldo murió el 15 de enero de 1909. Su vida fue una búsqueda permanente de la voluntad de Dios, un confiar en la divina providencia y en el trabajo duro.
José Freinademetz nació el 15 de abril de 1852 en la ciudad de Oites, en Tirol del Sur, que en ese momento era territorio austriaco, pero la ciudad ahora se llama Alta Badia y pertenece a Italia. Sus padres eran campesinos muy pobres, tuvieron trece hijos y formaron una familia muy cristiana.
Su entrega a la vida misionera en el seguimiento de Cristo y su amor por el pueblo chino lo expresó en esta declaración: «Si pudiera recuperar mi juventud, elegiría de nuevo mi vocación, elegiría ser misionero en el sur de Shandong».